© Olga Álvarez
IMPRO es un proyecto en constante cambio y movimiento, como lo es también la vida y el universo. Es mi último proyecto y a la vez el primero, siendo el arte de la improvisación una práctica que siempre me ha acompañado, quizás primero como un juego y luego como una experimentación necesaria. Impro es un conjunto de instantáneas de un pasado que se convierte en presente, de fragmentos de un pedazo de vida impulsada por las ganas de jugar, de crear, de descubrir y de compartir.
Cada una de las improvisaciones tiene como base ostinatos sencillos, patrones harmónicos que reviven de un tiempo pasado para acompañar y abrazar la improvisación melódica, rítmica y harmónica del momento presente. Impro también es un diálogo que no se concreta en ninguna palabra pero que se sirve del sonido para expresarse. Comparto este diálogo con el público y con quien quiera escucharme, pero también con una combinación de personalidades musicales que integran este proyecto: Jordi Gaspar al contrabajo, Clara Peya al piano, Driss El Maloumi al laúd, Hakan Güngör al salterio qanun, Nedyalko Nedyalkov a la flauta kaval y David Mayoral a la percusión. Impro también se presenta en formato escénico, con la agradable colaboración de Shantala Shivalingappa, magnífica bailarina y coreógrafa que entrega su cuerpo y movimiento a las músicas surgidas de Impro. Este espectáculo lo hemos llamado Impro Sharana, pues la Sharana es la entrega en lengua india y, a la vez, parte esencial del nombre de Shiva Sharana, el dios de la danza.
Impro es un reto y una ilusión vivida en compañía de instrumentos de la mediterránea, de músicos queridísimos y de amigos y familiares que forman parte de mi.
Este es el camino que intento trazar en cada uno de los conciertos, únicos todos ellos y fruto de la emoción y del momento justo.
